De acuerdo a lo informado por diferentes agencias internacionales, este miércoles el gobierno de Israel y Hamás llegaron a un acuerdo para poner un alto al fuego en la Franja de Gaza, el que además incluye liberación e intercambio de rehenes. El conflicto armado, que se ha extendido por 15 meses, todavía no cuenta con la oficialización del acuerdo, sin embargo, se dio a conocer que inicialmente contempla un cese a las armas que se extendería por seis semanas. Según lo consensuado, en una primera etapa Hamás liberará a 33 rehenes israelíes, mientras que el gobierno de Benjamin Netanyahu hará lo mismo con un centenar de prisioneros palestinos. Vale destacar que Hamás, organización que lidera la franja de Gaza, informó a la agencia Reuters que su delegación entregó su aprobación al acuerdo, confirmando su disposición para proceder con el cese de hostilidades y el retorno de rehenes. Por otro lado, un funcionario palestino reveló que el grupo armado ya había otorgado una aprobación verbal y estaba a la espera de más detalles para formalizar su aceptación por escrito. Hamás, mediante una declaración pública, sostuvo que “el movimiento ha tratado este asunto con plena responsabilidad y positividad, derivadas de su deber hacia nuestro firme y resistente pueblo de la Franja de Gaza, para detener la agresión sionista contra ellos y poner fin a las masacres y al genocidio al que se enfrentan“. En suma, este pacto fue negociado por mediadores egipcios y qataríes, con el respaldo de Estados Unidos, y llega cerca de la toma de posesión del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, este 20 de enero. De hecho, el magnate ya confirmó esta tregua. Finalmente, recordar que la ofensiva israelí en Gaza comenzó después de que militantes de Hamás atravesaron las barreras de seguridad el 7 de octubre de 2023, perpetrando ataques en comunidades israelíes que resultaron, en primera instancia, en la muerte de 1.200 personas y el secuestro de más de 250 rehenes.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, anunció este martes que el gabinete de seguridad ha aceptado la propuesta de acuerdo de ''alto el fuego'' con Hezbolá en Líbano por los próximos 60 días. Eso sí, aseguró que Israel mantendrá “libertad de acción” en caso que el bando contrario viole el tratado. “La duración del alto el fuego dependerá de lo que ocurra en Líbano y nosotros mantendremos total libertad de movimiento”, señaló el líder israelí. Lo anterior, supondría poner fin a más de un año de ataques transfronterizas con Hezbolá y meses de una guerra a gran escala que ha dejado un saldo de miles de personas fallecidas. Fue en medio de un discurso televisado pregrabado, que Netanyahu dijo que el grupo militar Hezbolá “ya no era el mismo” después de la ofensiva de Israel, y dio tres razones principales por las que ahora persigue un alto el fuego. Primero, para permitir que Israel “se concentre en la amenaza iraní”. Segundo, para renovar las “fuerzas militares y el equipo” del país, que dijo que se habían agotado en parte por “demoras” en el suministro de armas. Y tercero, para aislar a Hamas en Gaza, puntualizó. De acuerdo con The Times of Israel, el documento no incluye explícitamente que Israel pueda responder a Hezbolá si el grupo, catalogado terrorista, se salta el alto el fuego en zonas al norte del río Litani en Líbano. En concreto, la resolución obliga a Israel a informar a Estados Unidos sobre cualquier tipo de violación al dictamen, y este valoraría lo sucedido. Es decir, que la posibilidad de Israel para responder a Hezbolá en la zona mencionada es “ambigua”. Conforme a lo señalado por medios internacionales, el ''pacto de no agresión'' tiene como objetivo implementar la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, con la esperanza de que pueda formar la base de una tregua duradera.La Resolución 1701 fue adoptada para poner fin a una guerra de 34 días entre Israel y el Líbano en 2006, y había mantenido una calma relativa en la zona durante casi dos décadas. Eso duró hasta el día después del ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023, cuando Hezbolá atacó y con ello, inició la pugna bélica. Con todo, cabe destacar que el acuerdo entrará en vigor a las 10:00 horas de la mañana de este miércoles 27 de noviembre.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtió el pasado miércoles que su país no apoyará a Israel en caso de que decida atacar las instalaciones nucleares de Irán. La declaración fue hecha en respuesta al ataque sufrido por Israel el martes, cuando 180 misiles balísticos iraníes ingresaron en su territorio, algunos de los cuales causaron daños y la muerte de un civil palestino en Cisjordania. Ante esto,la respuesta es no, afirmó Biden ante la posibilidad de que Israel tome represalias contra Irán. Añadió que el G7 está trabajando en una declaración conjunta para condenar lo que calificó como uninaceptable ataque iraní. Biden reiteró el compromiso de Estados Unidos con la seguridad de Israel, pero fue claro al señalar que no respaldará acciones que incluyan ataques a las instalaciones nucleares de Irán. Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, respaldó el derecho de Israel a defenderse, calificando el ataque iraní como unaescalada sin precedentes. Sin embargo, subrayó que el gobierno israelí tiene la última palabra sobre cómo responder.Ellos son un país soberano que toma sus propias decisiones, dijo Miller. Mientras tanto, el Ejército israelí, a través de su jefe del Estado Mayor, el teniente general Herzi Halevi, afirmó estar preparado para una respuesta contundente y aseguró que Israel tiene la capacidad degolpear cualquier punto de Oriente Medio. La tensión en la región sigue en aumento mientras la comunidad internacional busca mediar en la crisis y evitar una mayor escalada militar.
En una jornada marcada por la escalada de violencia, Israel llevó a cabo dos ataques aéreos en Líbano que resultaron en la muerte de cuatro importantes líderes palestinos, incluida la del comandante de Hamás en Líbano, Fatah Sharif Abu Al Amin. Hamás informó que su líder murió junto con su esposa, hijo y nuera en un ataque que tuvo lugar en el campo de refugiados de Al Bass, en el sur del país. El comandante Fatah Sharif murió al amanecer en una operación que calificamos de asesinato criminal, lamentó la organización islamista en un comunicado, donde también acusó a Israel de haber atacado deliberadamente a toda la familia. Ante esto, en un ataque separado en Beirut tres dirigentes del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) fueron asesinados cuando un bombardeo israelí alcanzó un edificio en el barrio de Cola. Las víctimas fueron identificadas como Muhammad Abdul Aal, jefe de seguridad militar del FPLP; Imad Awda, comandante militar en Líbano; y Abdul Rahman Abdul Aal, líder destacado del Frente. Este ataque es el primero de Israel contra la capital libanesa desde que comenzaron las hostilidades con Hezbolá hace casi un año. El Ejército israelí, que hasta ahora ha guardado silencio sobre estos ataques específicos, informó en un comunicado de otros bombardeos en el área de Bekaa, dirigidos principalmente a posiciones de Hezbolá. Los recientes enfrentamientos han dejado al menos mil muertos y más de 6.000 heridos, mientras que un millón de personas han huido de sus hogares, según el Gobierno libanés. La ONU reporta que miles de refugiados, en su mayoría niños, han cruzado a Siria en condiciones precarias. La comunidad internacional sigue con preocupación por los eventos, mientras se teme que la violencia continúe escalando en la región.
Los intensos bombardeos israelíes en Líbano han dejado un saldo trágico de 356 muertos, incluidos 24 niños, y más de 1.240 heridos. Este lunes, el ejército israelí llevó a cabo ataques aéreos contra más de 1.100 objetivos vinculados al movimiento islamista Hezbolá, en respuesta a las tensiones crecientes en la región. Entre los ataques más destacados se encuentra uno en Beirut, dirigido contra Ali Karake, un comandante de Hezbolá, aunque no se ha confirmado su paradero tras el ataque. En un video publicado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, instó a los ciudadanos libaneses a mantenerse alejados de laszonas peligrosas mientras las operaciones militares continúan. Por su parte, el primer ministro libanés, Najib Mikati, denunció lo que considera unplan de destrucción orquestado por Israel, haciendo un llamado a la ONU y a las naciones influyentes para que intercedan y frenen esta agresión. Hezbolá, un actor político y militar clave en Líbano, ha mantenido un frente activo contra Israel desde el inicio del conflicto en la Franja de Gaza, apoyando a su aliado Hamás en la región.
De acuerdo a lo informado por diferentes agencias internacionales, este miércoles el gobierno de Israel y Hamás llegaron a un acuerdo para poner un alto al fuego en la Franja de Gaza, el que además incluye liberación e intercambio de rehenes. El conflicto armado, que se ha extendido por 15 meses, todavía no cuenta con la oficialización del acuerdo, sin embargo, se dio a conocer que inicialmente contempla un cese a las armas que se extendería por seis semanas. Según lo consensuado, en una primera etapa Hamás liberará a 33 rehenes israelíes, mientras que el gobierno de Benjamin Netanyahu hará lo mismo con un centenar de prisioneros palestinos. Vale destacar que Hamás, organización que lidera la franja de Gaza, informó a la agencia Reuters que su delegación entregó su aprobación al acuerdo, confirmando su disposición para proceder con el cese de hostilidades y el retorno de rehenes. Por otro lado, un funcionario palestino reveló que el grupo armado ya había otorgado una aprobación verbal y estaba a la espera de más detalles para formalizar su aceptación por escrito. Hamás, mediante una declaración pública, sostuvo que “el movimiento ha tratado este asunto con plena responsabilidad y positividad, derivadas de su deber hacia nuestro firme y resistente pueblo de la Franja de Gaza, para detener la agresión sionista contra ellos y poner fin a las masacres y al genocidio al que se enfrentan“. En suma, este pacto fue negociado por mediadores egipcios y qataríes, con el respaldo de Estados Unidos, y llega cerca de la toma de posesión del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, este 20 de enero. De hecho, el magnate ya confirmó esta tregua. Finalmente, recordar que la ofensiva israelí en Gaza comenzó después de que militantes de Hamás atravesaron las barreras de seguridad el 7 de octubre de 2023, perpetrando ataques en comunidades israelíes que resultaron, en primera instancia, en la muerte de 1.200 personas y el secuestro de más de 250 rehenes.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, anunció este martes que el gabinete de seguridad ha aceptado la propuesta de acuerdo de ''alto el fuego'' con Hezbolá en Líbano por los próximos 60 días. Eso sí, aseguró que Israel mantendrá “libertad de acción” en caso que el bando contrario viole el tratado. “La duración del alto el fuego dependerá de lo que ocurra en Líbano y nosotros mantendremos total libertad de movimiento”, señaló el líder israelí. Lo anterior, supondría poner fin a más de un año de ataques transfronterizas con Hezbolá y meses de una guerra a gran escala que ha dejado un saldo de miles de personas fallecidas. Fue en medio de un discurso televisado pregrabado, que Netanyahu dijo que el grupo militar Hezbolá “ya no era el mismo” después de la ofensiva de Israel, y dio tres razones principales por las que ahora persigue un alto el fuego. Primero, para permitir que Israel “se concentre en la amenaza iraní”. Segundo, para renovar las “fuerzas militares y el equipo” del país, que dijo que se habían agotado en parte por “demoras” en el suministro de armas. Y tercero, para aislar a Hamas en Gaza, puntualizó. De acuerdo con The Times of Israel, el documento no incluye explícitamente que Israel pueda responder a Hezbolá si el grupo, catalogado terrorista, se salta el alto el fuego en zonas al norte del río Litani en Líbano. En concreto, la resolución obliga a Israel a informar a Estados Unidos sobre cualquier tipo de violación al dictamen, y este valoraría lo sucedido. Es decir, que la posibilidad de Israel para responder a Hezbolá en la zona mencionada es “ambigua”. Conforme a lo señalado por medios internacionales, el ''pacto de no agresión'' tiene como objetivo implementar la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, con la esperanza de que pueda formar la base de una tregua duradera.La Resolución 1701 fue adoptada para poner fin a una guerra de 34 días entre Israel y el Líbano en 2006, y había mantenido una calma relativa en la zona durante casi dos décadas. Eso duró hasta el día después del ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023, cuando Hezbolá atacó y con ello, inició la pugna bélica. Con todo, cabe destacar que el acuerdo entrará en vigor a las 10:00 horas de la mañana de este miércoles 27 de noviembre.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtió el pasado miércoles que su país no apoyará a Israel en caso de que decida atacar las instalaciones nucleares de Irán. La declaración fue hecha en respuesta al ataque sufrido por Israel el martes, cuando 180 misiles balísticos iraníes ingresaron en su territorio, algunos de los cuales causaron daños y la muerte de un civil palestino en Cisjordania. Ante esto,la respuesta es no, afirmó Biden ante la posibilidad de que Israel tome represalias contra Irán. Añadió que el G7 está trabajando en una declaración conjunta para condenar lo que calificó como uninaceptable ataque iraní. Biden reiteró el compromiso de Estados Unidos con la seguridad de Israel, pero fue claro al señalar que no respaldará acciones que incluyan ataques a las instalaciones nucleares de Irán. Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, respaldó el derecho de Israel a defenderse, calificando el ataque iraní como unaescalada sin precedentes. Sin embargo, subrayó que el gobierno israelí tiene la última palabra sobre cómo responder.Ellos son un país soberano que toma sus propias decisiones, dijo Miller. Mientras tanto, el Ejército israelí, a través de su jefe del Estado Mayor, el teniente general Herzi Halevi, afirmó estar preparado para una respuesta contundente y aseguró que Israel tiene la capacidad degolpear cualquier punto de Oriente Medio. La tensión en la región sigue en aumento mientras la comunidad internacional busca mediar en la crisis y evitar una mayor escalada militar.
En una jornada marcada por la escalada de violencia, Israel llevó a cabo dos ataques aéreos en Líbano que resultaron en la muerte de cuatro importantes líderes palestinos, incluida la del comandante de Hamás en Líbano, Fatah Sharif Abu Al Amin. Hamás informó que su líder murió junto con su esposa, hijo y nuera en un ataque que tuvo lugar en el campo de refugiados de Al Bass, en el sur del país. El comandante Fatah Sharif murió al amanecer en una operación que calificamos de asesinato criminal, lamentó la organización islamista en un comunicado, donde también acusó a Israel de haber atacado deliberadamente a toda la familia. Ante esto, en un ataque separado en Beirut tres dirigentes del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) fueron asesinados cuando un bombardeo israelí alcanzó un edificio en el barrio de Cola. Las víctimas fueron identificadas como Muhammad Abdul Aal, jefe de seguridad militar del FPLP; Imad Awda, comandante militar en Líbano; y Abdul Rahman Abdul Aal, líder destacado del Frente. Este ataque es el primero de Israel contra la capital libanesa desde que comenzaron las hostilidades con Hezbolá hace casi un año. El Ejército israelí, que hasta ahora ha guardado silencio sobre estos ataques específicos, informó en un comunicado de otros bombardeos en el área de Bekaa, dirigidos principalmente a posiciones de Hezbolá. Los recientes enfrentamientos han dejado al menos mil muertos y más de 6.000 heridos, mientras que un millón de personas han huido de sus hogares, según el Gobierno libanés. La ONU reporta que miles de refugiados, en su mayoría niños, han cruzado a Siria en condiciones precarias. La comunidad internacional sigue con preocupación por los eventos, mientras se teme que la violencia continúe escalando en la región.
Los intensos bombardeos israelíes en Líbano han dejado un saldo trágico de 356 muertos, incluidos 24 niños, y más de 1.240 heridos. Este lunes, el ejército israelí llevó a cabo ataques aéreos contra más de 1.100 objetivos vinculados al movimiento islamista Hezbolá, en respuesta a las tensiones crecientes en la región. Entre los ataques más destacados se encuentra uno en Beirut, dirigido contra Ali Karake, un comandante de Hezbolá, aunque no se ha confirmado su paradero tras el ataque. En un video publicado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, instó a los ciudadanos libaneses a mantenerse alejados de laszonas peligrosas mientras las operaciones militares continúan. Por su parte, el primer ministro libanés, Najib Mikati, denunció lo que considera unplan de destrucción orquestado por Israel, haciendo un llamado a la ONU y a las naciones influyentes para que intercedan y frenen esta agresión. Hezbolá, un actor político y militar clave en Líbano, ha mantenido un frente activo contra Israel desde el inicio del conflicto en la Franja de Gaza, apoyando a su aliado Hamás en la región.