el lunes pasado a las 18:03
En medio de la controversia sobre la financiación de centros de investigación en Chile, se ha centrado la atención en los ganadores, perdedores y criterios de selección. Sin embargo, lo que no se está discutiendo —y debería alarmarnos— es el verdadero derroche que ha generado este diseño de política pública.
Se recibieron 181 propuestas de centros, cada una compuesta por un promedio de 8 investigadores, lo que suma más de 1.400 científicos trabajando a tiempo completo durante al menos un mes y medio de los tres meses que duró el concurso. Esto sin tener en cuenta el tiempo del personal administrativo que apoya estas postulaciones. A pesar de esto, solo se financiarán 29 centros, con una tasa de éxito del 16 %, dejando al 84 % restante dedicando tiempo, energía y talento a un proceso sin retorno.
Si valoramos cada mes de trabajo de un investigador en $3 millones de pesos —una estimación conservadora considerando la formación y productividad científica requerida— esta etapa de preparación representó una inversión de $6.500 millones de pesos. En otras palabras, se nos hizo trabajar como si estuviéramos construyendo un nuevo Centro de Salud Familiar (CESFAM), solo para demolerlo antes de abrir sus puertas.
Estas convocatorias no fortalecen la ciencia; la debilitan. Generan frustración, competencia desmedida y pérdida de confianza en el sistema. No es solo ineficiencia: es una forma estructural de desperdiciar capacidades estratégicas del país.
Esto resalta la urgente necesidad de ampliar el financiamiento para cubrir al menos el 30 % de las iniciativas presentadas. Si el Estado no dispone de esos recursos, la política de centros debería contemplar formas concretas de colaboración con el sector productivo. Es crucial obtener financiamiento adicional y finalmente aumentar el estancado porcentaje del PIB que Chile destina a ciencia, tecnología e innovación.
Además, este modelo es completamente evitable. En la Unión Europea, por ejemplo, estos concursos se realizan en dos fases: primero una manifestación de interés, económica y simple, que permite filtrar eficientemente. Solo los proyectos más prometedores avanzan a una segunda etapa más profunda, a diferencia del proceso exigido desde el principio a todos los postulantes aquí.
No se trata simplemente de premiar todo lo que se presenta, sino de diseñar procesos más inteligentes para evitar desperdiciar millones en valioso trabajo intelectual. Chile no necesita más loterías científicas, sino una política que fortalezca el talento, enfoque los recursos y ponga la ciencia al servicio de los grandes desafíos del país.
ayer a las 12:36
El presidente Donald Trump ha comunicado la imposición de nuevos aranceles a países con los que no ha avanzado en acuerdos comerciales, incluyendo a sus socios Japón y Corea del Sur.
hoy a las 7:00
ayer a las 16:18
ayer a las 14:00
ayer a las 12:36
El presidente Donald Trump ha comunicado la imposición de nuevos aranceles a países con los que no ha avanzado en acuerdos comerciales, incluyendo a sus socios Japón y Corea del Sur.
hoy a las 7:00